Infantiles I

La locura vino a este mundo para hacerle travesuras a la gente, ella paseaba por las calles de la gran y caótica ciudad, corría entre los automóviles y la gente que caminaba a prisa en un día común y corriente a una hora en la cuál nadie era consciente de su existencia. Los adultos salían de sus trabajos y otros iban por sus hijos a sus escuelas; todo el mundo desesperado y estresado.


La locura  se acercaba a las escuelas, jugaba con los niños, les hacia cosquillas y ellos reían pero cuando un adulto llegaba, la locura se enojaba mucho pues se sentía muy sola así que continuaba con su camino hasta que se encontró con un hombre solo y enojado, la locura le quiso hacer una travesura al quitarle su sombrero pero este se fué, nunca notó que su sombrero se había perdido el solo siguió su camino. La locura fué tras de él tratando de ponerle el pie para que este tropesara pero no lo lograba, le jalaba el saco pero el no reaccionaba; entonces la locura se preguntó: ¿Por qué me ignora? ¿Será un robot?, ¿y si está muerto?, ¿y si yo morí?

Oferta de temporada

Qué se puede comparar el verdadero calor de hogar con los fríos senderos del enamoramiento, cuando pretende perder todo el decoro  dejándonos caer en brazos y en manos; en piernas y en falos que creemos que nos salvarán como eternas princesas de hace más de cinco siglos. La verdad es que no hay hombre postmodernista que haya montado un corsel con fines bélicos y reviva aquel concepto de valentía que quedó plasmado en los cuentos de hadas.

La guerra hoy en día señores se vive mediante las telecomunicaciones, el mundo virtual, los virus y la economía; es la guerra de los seres racionales.

Esque el amor  ha muerto y todo queda reducido a un nivel sensorial. El amor se ha cnvertido en una necesidad creada: si ya poseo  mi mente, mi cuerpo y mi dinero, este - el amor- comienza a ofertarse, a prostituirse:

"Amor a tu medida"

Igual que comprar un par de zapatos, cuando los encuentres jamás querrás deshacerte de ellos y recuerda no todos los zapatos son para cualquiera: 

Habemos quienes tenemos el corazón mas grande o mas pequeño, unos mas delgado y otros mas grueso, unos con un corazón débil y que decir de aquellos que cuentan con un corazon tan fuerte como el de un ratón. 

El amor es unitalla y unisex también.