Y me he dado cuenta que conforme vamos creciendo esto de las relaciones amorosas se vuelven cada vez más difíciles y muchas pueden ser las razones pero la principal -al menos en mi caso- es el MIEDO.
Aún recuerdo mis primeros amores de la adolescencia, recuerdo que los sentimientos y emociones que tenía por esa persona eran inmensos y muy intensos, por ellos podría dar hasta la vida, y en unos casos casi la doy, recuerdo hacer a mi familia y a mis amigos a un lado por él, era común no entrar a clases por querer estar con esa persona; mentirles a mis papás de que iba a salir con una amiga cuando en realidad era él al que iba a ver y que decir de las escapadas en la noche todo por ir con él a una fiesta sin embargo las cosas de acaban y ese tipo de relaciones también.
Terminé inmensidad de veces con el corazón en cachitos y cada vez fué más difícil volver a contruirlo y ahora que he aprendido muchas más cosas veo otros detalles en los hombres, no solo si es guapo o si tiene buenos sentimientos ahora resalta su profesión, en que trabaja, que vicios tiene, que fobias y filias pueda presentar, si tiene coche, si se viste bien, si es avaro o si es compartido, si vive con sus padres o vive solo y por que, entre otras muchas cosas que hacen que los sentimientos se vayan escondiendo cada vez más hasta dejar de verlos. Es entonces que cada vez es más difícil enamorarse de alguien, básicamente dos elementos en esta historia hacen que el miedo se haga presente: nuestros corazones cansados de ser rehabilitados y el contexto del prospecto, si está a nuestra altura ó si cumple con nuestras expectativas.
