miércoles, 18 de julio de 2012

Calacas Jazz

No cabe duda que esta tarde fuí la mujer más feliz del mundo, a pesar de la lluvia que casualmente esta vez armonizó mi dia  en un festival de Jazz (que mejor música ) y con tres de mis mejores amigos, extrañando a otros que por algunas circunstancias quizás no pudieron acompañarnos.


Es interesantísimo  esa fraternidad, esa hermandad que hay cuanto tu puedes expresarte sin pena alguna diciendo las boludeces mas  hincha pelotas y aun asi  se unen contigo en carcajadas o en llanto, era como un código entre nosotros el cual curiosamente la gente a nuestro alrededor entendía, cabe señalar que muchos se horrorizaban  y otros rompían en una carcajada interna que era visible solo en sus mirada pero eso no nos importó.


No cabe duda que los amigos son la familia que uno escoje y vaya que he hecho una muy buena elección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario